viernes, 23 de diciembre de 2016

"ROGUE ONE", LA PELÍCULA MODERNA DE STAR WARS QUE PEDÍAMOS MUCHOS YA ESTÁ AQUÍ

Estas navidades y como también será así en la de los próximos años, Disney nos ha traído una nueva película del universo Star Wars. En este caso se trataba de "Rogue One: Una historia de Star Wars", un spin-off que nos cuenta como se sucedieron los hechos para conseguir los planos de la Estrella de la Muerte, actuando como precuela de "Una nueva Esperanza", lo que sería el Episodio IV y primera película de la saga cinematográfica.
Y tras ver lo que nos proponen es difícil que estuviera más satisfecho. Y es que Rogue One nos trae lo que muchos deseábamos ver cuando se anunció que Disney relanzaría la saga galáctica.
La comparativa con El Despertar de la Fuerza va a ser inevitable, y es que en mi opinión ésta película tiene muchas cosas que le pedía al episodio VII. Mientras que una copia todos los pasos importantes del episdio IV para contentar a los fans descontentos con la segunda trilogía, este episodio nos trae lo que muchos pedíamos, una expansión de la historia y del universo, y de paso nos ayuda a explicar cabos sueltos que la historia original podía tener. Aunque vuelva sus pasos hacia atrás, nos muestra nuevos personajes y planetas, nos aporta más información sobre lugares que conocíamos menos, descubrimos mejor como se vivían los inicios del Imperio y como los Rebeldes poco a poco se organizaron...


Rogue One es una aventura bélica moderna, y es justo lo que se necesitaba. Sin ser una obra redonda, nos trae originalidad y nuevas emociones y añade mitología a la historia, nos demuestra que todavía hay muchas cosas por contar sobre el univero SW, es volver al mundo de la primera trilogía con una película del Siglo XXI.
Si las dos películas producidas por Disney están protagonizadas por personajes femeninos, estos son muy distintos el uno del otro. Mientras que Rey es un personaje con carisma pero de momento plano del que de no sabemos nada sobre su pasado y que cada reto que consigue lo acaba logrando, la protagonista de Rogue One, Jyn Erso, es un personaje con mucha más complejidad, con dilemas morales e infancia traumática, un personaje que ha fallado y sigue fallando, y que lucha por la redención suya y de su familia. Sin duda un personaje mucho más interesante. Mientras que en el Episodio VII Rey parece una fangirl de la leyenda Jedi, Jyn es un personaje dentro de esa leyenda por derecho propio. Por otro lado, cierto es no hay ningún personaje en ésta película que se pueda comparar con Finn o Poe Dameron, otro defecto que se le puede achacar, pero la película no lo necesita. La protagonista se rodea de personas poco ejemplares que han tenido que hacer de todo para sobrevivir y que quieren dar la vuelta a su destino para convertirse en héroes a favor de la libertad perdida. Otra vez la redención.
Todo esto acompañado de una magistral banda sonora de Michael Giachino, que ha llegado para quedarse y demuestra haber aprendido lo mejor del maestro Williams,
Aunque algunas voces aseguran que la primera parte de la película les parece pesada, a mí me atrapó desde su inicio. Lo que muy pocos dudan es que el último tercio es muy emocionante, dónde vemos la mejor batalla que se ha visto en toda la saga cinematográfica. A éstas alturas no hay nadie que no esté enganchado a la epopeya galáctica.
Rogue One también es conocedora de lo que es, y sabe lo que puede aportar al universo y no pretende ser más de lo que es, un gran entretenimiento galáctico que homenajea a la saga clásica sin caer en tópicos ni abusar de nostalgia, nos trae una nueva historia tan innecesaria como trascendente y nos deja un personaje ya marcado para la historia de Star Wars.
Si todos los spin-offs que se piensan hacer fueran así, que bienvenido sean.

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