miércoles, 17 de enero de 2018

CIELO SANTO CABARET: ACROBACIAS, EROTISMO Y MUCHA DIVERSIÓN PARA LA NOCHE MADRILEÑA

Hace unas semanas tuvimos el placer de asistir a Cielo Santo Cabaret, el nuevo espectáculo de el Cabaret Clandestino que se pone en escena en La Estación Gran Teatro Principe Pío, el espacio dónde se situaba la antigua estación de Principe Pío y ahora se ha transformado en un espacio cultural.
Clandestino Cabaret es una compañía que lleva haciendo un espectáculo de cabaret y números acrobáticos desde hace un par de temporadas. Viendo el éxito que estaban teniendo, decidieron estrenar otro espectáculo, con la esencia del anterior pero con un toque diferente. Así nació "El After de la Vida".


En Cielo Santo Cabaret nos trasladan a un antro que se sitúa en el cielo, un lugar al que de momento no podemos ir, pero han sido considerados con la ciudad de Madrid poniendo la primera sucursal en la tierra, y en el que veremos números de todo tipo, algunos llenos de espectacularidad, otros con mucho más humor y hasta otros con un toque erótico sugerente.

El show se abre con la maestra de ceremonias y dueña del cabaret Inés León dándonos la bienvenida y presentándonos el espectáculo, acompañada de sus musculados ángeles. Si te esperabas a San Pedro por aquí estabas muy equivocado. Una presentación divertida y juguetona.
De ahí pasaremos a un espectacular baile en barra, para abrir boca de todo lo que veremos.


Piruetas en las alturas agarrados a una cortina o subidos a un aro, números musicales, acrobacias y contornsiones en pareja que parecen imposibles de realizar... todo eso y más nos encontraremos en un espectáculo que os aseguro que es muy difícil que no os deje con la boca abierta.

Pero no todo va a ser espectacularidad, entre números y números aparece el personaje de Cupido interpretado por el actor Wilbur Víctor para provocar las carcajadas del público. Una cita con una persona del público, una pasarela de moda pero en vez de mostrar ropa se muestran de forma divertida los distintos penes que hay por el mundo, un espectáculo de magos patosos como si hubieran venido del mismísimo Las Vegas... el humor no es exquisito, no es el más ingenioso, pero simplemente funciona. Varios números en los que era fundamental la química con el público y que funcionaron a la perfección.


Es increíble como con solo seis personas en el escenario pueden montar tantos números distintos, y de tanto nivel. Cielo Santo Cabaret es una opción perfecta para ir con tu pareja, o para ir con amigos a pasar un rato divertido viendo acróbatas de alto nivel. Un espectáculo que si bien no tiene todavía el nombre de otros espectáculos más comerciales, no tiene nada que envidiar a muchos espectáculos que se celebran en la mismísima Gran Vía. Otra opción para el ocio madrileño divertida, diferente y seguramente necesaria.


domingo, 7 de enero de 2018

VIEJÓVENES: UN AUTOHOMENAJE AL HUMOR MÁS ABSURDO Y CHANANTE

Hace tres años los cómicos Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla estaban deseosos de volver a la esencia de lo que les hizo famosos. Para los más despistados, ellos dos formaban parte de lo que se llamarían "Los Chanantes", ese grupo de jóvenes que con su humor absurdo-manchego-friki fueron una revolución, primero gracias a los sketches del programa "La Hora Chanante" en el canal Paranmount Comedy y después en "Muchachada Nui" en La 2, convirtiéndose en un auténtico fenómeno en Youtube (ellos fueron los protoyoutubers) para miles de jóvenes.
Después llegaría "Museo Coconut", su primera serie de ficción emitida en el canal Neox y sus numerosas participaciones en series de televisión y cortos y largos de cine.
Por el año 2015, cansados un poco de sus tours de monólogos y viendo el maltrato que estaba sufriendo su último trabajo para televisión "Retorno a Lilifor" en Atresmedia, decidieron unirse los dos, formando por primera vez pareja profesional ellos dos solos como homenaje a sus más de 12 años de carrera y para retomar una de sus grandes pasiones: crear y realizar sketches.



Así nació el espectáculo Viejóvenes, que lleva más de dos años girando por los teatros de toda España, y dónde nosotros tuvimos el placer de verles en el madrileño Teatro La Latina. El nombre del espectáculo viene del grupo de música humorística subno-pop "Ojete Calor", formada por Carlos Areces, antiguo compañero suyo en Los Chanantes y Aníbal Gómez.
El show es un despiporre para cualquier seguidor de estos dos cómicos, y un no parar de reir desde el principio hasta el final. Todo comienza con un sketch en una pantalla gigante en el que participan precisamente con un cameo los chicos de Ojete Calor para presentar el espectáculo. Tras esto, Joaquín Reyes nos dará la bienvenida con un pequeño monólogo, a modo de introducción, para continuar con un montón de sketches nuevos creados por los dos con lo mejor de su humor absurdo, para delicia de los asistentes, que no podrán parar de carcajear con cada gag durante todo el show. En los breves descansos entre algún número especial y otro, se aprovecha para proyectar otros sketches animados o que se ha aprovechado de una realización audiovisual para crear el chiste, que no hacen más que seguir la tónica disparatada del resto del espectáculo.


En Viejóvenes cada número es distinto al otro, y no se huye de utilizar disfraces o pelucas de mujer, hecho que ya era característico en sus programas televisivos. En la recta final del show, será Ernesto Sevilla el que haga un pequeño monólogo, para acabar con una traca final con más sketches de morirse de la risa, y finalizar de forma inmejorable con los dos cómicos junto al público cantando el mítico himno de La Hora Chanante "Vivo con Tu Madre", del histriónico y perturbador personaje del programa "El Payaso".

Viejóvenes acaba siendo dos horas de risas aseguradas con la esencia del humor de estos dos cómicos, que se les ve en su salsa en el escenario haciéndose un autohomenaje a sí mismos, a su trabajo y a su estilo de humor, a la vez que a todos los jóvenes y no tan jóvenes (las edades del público rondaban desde los veintipocos hasta los cuarenta y tantos) que llevan quince años riéndose de "sus tonterías".